Los costes indirectos
se conceptúan como aquellos costes que no tienen una identificación
clara con las unidades de actividad específicas o de producción.
Por tanto, aún cuando son costes qu contribuyen a la obtención
de los outputs de la empesa, no pueden ser asignados a estos objetos
de una forma directa. Como ejemplos de cotes indirectos se pueden citar:
fuerza motriz, calefacción, luz, arendamientos, etc.
Un adecuado
análisis de costes aconseja efectuar la distinción entre
los costes indirectos de producción y los costes indirectos
generales. Así, los costes indirectos de producción
son costes vinculados al proceso productivo, mientras que los
costes indirectos "generales" aglutinan los factores
de costes asignables a las restantes áreas funcionales de la
empresa tales como: comercial, administración, finanzas, investigación
y desarrollo, logística, etc. No obstante, conviene destacar
que la inclusión o no de estos últimos, en el cálculo
del coste del producto, dependerá del sistema de coste utilizado.
Concretando
algo más la delimitación conceptual del término:
costes indirectos de producción se podrían definir
como el coste de aquellos factores que contribuyen a obtener el
output correspondiente, exceptuando a tal efecto los costes indirectos
(materia prima y mano de obra). Así, se pueden señalar
como factores integrantes de esta categoría: combustibles,
repuestos, amortización de maquinaria, mantenimiento, supervisión,
control de calidad, suministros, etc.
En relación a la acutal estructura de costes de las empresas,
es destacable el cambio sustancional que la misma ha experimetado,
tanto cuantitavia como cualitativamente, con un aumento considerable
de los costes indirectos vinculados a la as actividades tales como
: producción, comercialización, investigación,
etc., observándose una pérdida de relevancia de otro
factores convencionalmente significativos.
Como consecuencia del incremento de la automatización y mecanización
a que se han visto abocados muchos procesos productivos, se observa
con cierta frecuencia una disminución de la Mano de Obra Directa,
y un crecimiento de los costes asociacos a actividades secundarias
tales como: mantenimiento, reglajes, preparaicón de la producción,
etc.
Este modelo productivo supone elevados costes de inversión
en inmovilizaciones, así como de mantenimiento de dichas inversiones,
y la implicación de personal cada vez más especializado.
En general, la importancia cunantitativa de los costes indirectos
de producción es función directa del tamaño de
la empera, de la tecnología incorporada, y de las características
de los mercados en los que se opera, así como del tipo de producto
que comercializa.